miércoles, 20 de marzo de 2019


                   

         ¿Estudiantes espectadores?

Aunque en la actualidad me desempeño como directora de un centro educativo y maestra de Educación Superior, en mi recorrido como docente y coordinadora en todos los niveles y grados de la educación preuniversitaria en diferentes centros educativos, he observado y llevando conmigo grandes inquietudes de los procesos áulicos y la relación alumno y docente y viceversa. 

Gran tristeza sentía cuando a esos mismos estudiantes que veía tan integrados en algunas clases, lo podía observar sin deseos de entrar ni participar en algunas de las asignaturas que le correspondían en el día, en otras aulas. En varios centros educativos y aulas que visito, observo un común denominador y es que varios estudiantes siempre eligen las últimas sillas y mesas. Pero éstos no se conforman con elegir estas últimas, sino que además, algunos las alejan lo más que le sea posible, hasta el punto que la llegan a ubicar justo pegada a la pared de atrás del aula. 

A veces me he llegado a imaginar que si estos estudiantes traseros o como a veces le llamo "espectadores áulicos " pudieran romper la pared para ubicar sus respectivas mesas y sillas del otro lado del curso y estar màs lejos del profesor y de los demás compañeros lo harían. Pero creo que no pueden hacerlo porque lamentablemente para ellos, ya en mi país, -Republica Dominicana- las divisiones entre un curso y otro son hechas de materiales de construcción muy fuertes como son el block, cemento y las varillas. 

Con mucha tristeza comunico que en realidad no logro entender por qué en una clase que supuestamente es "participativa" solo se expresa un grupito de estudiantes -que generalmente son los que ocupan las primeras sillas y mesas- es decir, siempre están cerca del profesor. 

He observado estudiantes que por nada en la vida prefieren los asientos delanteros. Siempre se sientan detrás. Para confirmar o rechazar ideas de posibles causas, he realizado una investigación cualitativa basada en entrevistas por grados a más de 500 estudiantes, y personalmente- al Azar- a más de 80 estudiantes, donde ellos manifiestan en un 55% que no participan en clases, ni se sientan delante, porque sienten miedo. Expresan que dicho temor se debe a que muchos docentes, si los estudiantes no le dan la respuestas que ellos esperan, entonces le hablan de una manera no agradable. 

Es importante destacar que en dicha investigación se enfatizó a los estudiantes la importancia de la veracidad y la objetividad de sus respuestas, para que posteriormente los resultados puedan ser analizados y se tomen para tomar medidas pertinentes y resulten en beneficio para ellos y de otros estudiantes.


Una de esas grandes inquietudes está relacionada con la participación de los estudiantes en clases, especialmente, de los estudiantes del nivel primario y secundario. Cuando era maestra de esos niveles disfrutaba del privilegio de poder compartir con los estudiantes de una manera tan linda y divertida que al escuchar el timbre todos ellos a una misma voz y con gestos de tristeza decían: -"uuui..Que malo, ya tocaron. Siga, siga profe".- Y era cuando tenia que hacerle entender- que era la hora de otra asignatura y de otro maestro. 


Las interrogantes que surgen son las siguientes: ¿Será posible que en el siglo XXI los cursos estén ordenados de forma que hayan estudiantes delante o detrás? ¿Influye la organización del aula en el logro de competencias? ¿No será que en las aulas todos los estudiantes deben estar ubicados de manera que tanto el docente como cada uno de los compañeros puedan sentirse parte integral de un grupo, verse la cara y estar cerca uno de otro? ¿Será que todavía estamos hablando de estudiantes aislados en las aulas? 


Pero las interrogantes siguientes parten el corazón ¿Cuándo se le pregunta algo a los estudiantes y lo que éstos responden no es lo que se espera, el docente le está dando la importancia que merece para fortalecer las debilidades o quizás para meditar en ellas reflexionando todos juntos a la luz de la ciencia hasta llegar a conclusiones? 

¿Se respeta al estudiante y se le escucha con actitud de reflexión y criticidad, igual que si la respuesta hubiese sido la que se esperaba? ¿Cuándo el estudiante aporta sus ideas si no coincide con la del docente esto le afecta en su evaluación? 


Otras preguntas pertinentes son ¿Todavía se está trabajando y evaluando a los estudiantes de acuerdo a la respuesta que el profesor lleva anotada, -quizás en un cuaderno o simplemente en sus pensamientos- o es que se entiende que toda respuesta es buena y es un gran aporte para discutir, analizar y construir competencias en las aulas? 

¿Cuáles son las metodologías de enseñanza que se están utilizando? ¿Será que es la metodología utilizada que permite la presencia de "estudiantes espectadores" en las aulas observando que el docente mire para otro lado para distraerse con un juego o bajar la cabeza para dormir en el aula? 


¿Educación del siglo XXI o del Siglo XVI? Estas interrogantes son simplemente para meditar en las prácticas áulicas, porque el docente es el timón de la embarcación en ese proceso de enseñanza y aprendizaje. 

Es el docente el que tiene que planificar el proceso con la participación de los mismos estudiantes para que las aulas sean espacios para el logro de competencias en y por los mismos estudiantes. Esto solo será posible cuando el docente a través de una buena organización y un proceso bien dirigido provoque la participación activa, el desarrollo del pensamiento crítico y la autonomía de cada uno de los estudiantes, siendo ellos mismos entonces los protagonistas en la construcción y logro de competencias. 

Autora: Dra. María Estela Minyetty Báez 




2 comentarios:

  1. la verdad es muy cierto, luego de leer esto recuerdo entrar a una clase de ciencias sociales y escuchar al profesor decir: como es que ustedes van a un concierto y hasta pagan VIP por estar alante, van a hacer una fila y quieren pasarle por encima a todo el mundo solo por no estar atras pero a la hora de venir a mi clase donde ustedes seran formados para hacer una sociedad distinta, donde ustedes se forman para salir a ser el ejemplo, entonces se pelean por el asiento de atras.

    y esto asi como indican los estudios puede tener varias causas: puede tanto ser la motivacion del estudiante, la personalidad de ese estudiante, o una que yo le llamaria la causa madre y es como actua el profesor cuando le toca evaluar delante del curso a un estudiante pudiendo esto afectar, sus sentimientos, haciendole ver inferior en sus habilidades de aprendizaje, sus habilidades de expresion de ideas e incluso hasta afectar su autoestima.

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  2. Por el momento al país le queda mucho por avanzar para que podamos llegar al punto de que todos los estudiantes sean valorados, lo que puedo observar de que este sistema al menos en ideología esta cambiando. Y puedo decir con optimismo de que podremos ver esto en un futuro no tan lejano.

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